Planifica un adiós según tus deseos y facilita las decisiones a tu familia en un momento difícil.
¿Por qué planificar mi despedida?
A veces, días después de la ceremonia, se nos ocurren ideas que el difunto o nosotros mismos hubiéramos preferido. Las prisas del actual sistema funerario, junto con la emotividad del momento, dificultan la reflexión. Llevados por la inercia, elegimos opciones estándares que pueden no ser acordes con la personalidad de quien se despide.
Poder definir nuestros deseos en vida facilitaría la toma de decisiones a nuestra familia, llegado el momento. Para que el funeral no se convierta en un peso, sino en un recuerdo que evocar cuando rememoren nuestra vida y nuestra ausencia.¿Cómo funciona el servicio de planificación del funeral?
Antes de empezar a escribir sobre tu despedida
Busca un momento de tranquilidad y un ambiente íntimo para pensar en unas palabras que pueden no resultarte sencillas. Prepárate un té, pon música relajante, crea un espacio de calma a tu alrededor.
El listado que encontrarás en el planificador son las principales preguntas que tu familia se plantearía en tu despedida. Dejar por escrito nuestras decisiones sobre cómo queremos que sea nuestro adiós es un acto de generosidad para los que se quedan. Para que en momentos de especial emotividad no tengan que preguntarse qué hubieras preferido.
Cada apartado te ofrece inspiraciones, ideas y posibilidades. Para ayudarte a reflexionar y diseñar la forma de despedirte que deseas. Un evento único y personal, como tu vida.
Cómo compartir los deseos de tu planificación
Decisiones más allá de la despedida
En el planificador también encontrarás cuestiones sobre las que podrías reflexionar: el legado digital, el testamento, la donación de órganos, etc. Aunque son temas que no están estrictamente relacionados con las ceremonias de despedida, llegado el momento, podrías querer trasmitir tus deseos o preferencias.Activistas de la salud
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